Siglo I d. S.
- Fecha de Publicación
- Etiquetas
- filosofia
- religion
- rebeldia
- nihilismo
- ego
- masa
Letra
Dicen que induzco al suicidio, qué vil mentira,
incito a la serenidad, creo descreencias.
Dinamito sus pilares morales
mientras mis palabras descuartizan sus dioses de mierda.Reduzco tus ilusiones al absurdo,
pon tu alma en mi mano y te haré ver que es solo polvo.
Puedo quitarte las ganas de vivir con 4 versos,
suponiendo que algún día llegáses a comprenderlos.La religión triunfa en un mundo de hombres con miedo,
imaginaron un cielo porque conocían el infierno.
Crearon al demonio para sentirse más buenos,
y a dios para compartir el peso de su ego.Jamás letras tan crudas impactaron un micrófono,
jamás hubo un nihilismo más profundo en boca de ningún filósofo.
Necios pensando que hago música...
sabios boquiabiertos no dan crédito a mi lírica.Soy tan profano que perforo tus tímpanos
con ondas de realidad hasta que te sientas violado,
y aun así no habrás cobrado más dignidad en tu vida,
dado que conocer la verdad es un mal necesario.¿Cómo negar que soy el autor más elevado?
¿cómo sostener tan siquiera que soy humano?
si bajo esta superioridad lingüística
tus ídolos más venerados quedan sepultados.Insensatos corroboran su necedad
al sentenciar la ausencia de sentido que hallan en mis obras,
y es que es normal que su sentido se obnubile,
y balbuceen semejante crímen con terca insolencia.Precisarían diez vidas para entender mi muerte...
si en cada una viviesen doscientos años.
Y aún así su ineptitud les llevaría
a acosarme de robarle letras al mismo diablo.Apuesto a que los que hace años se reían,
ahora palidecerían hasta lucir su tez nívea.
No tengo ego, solo razón en los labios,
traigo la voz de los afónicos de pánico.Tal vez no haya logrado nada,
para aquellos que no ven diferencia entre hacer historia y tener fama.
Ningún genio es apreciado fuera de su tumba:
dame muerte y años y me comerán la polla.No redacto mis pensares en un libro,
pese a ser el último filósofo serio del siglo.
Los tiempos cambian...
no soy la nueva versión de nada, soy La Aversión Mejorada.Las palabras de este loco doblan la cordura
de cualquiera de esos necios con espíritu de hormiga,
cuyo único fin en la vida es seguir una fila
y apoyar de forma irracional reglas establecidas.No respeto a los respetuosos,
y me cae mal la gente que se lleva bien con todo el mundo.
Respeto al que lo falta cuando expresa su opinión,
al odiado que no piensa cambiar para complaceros.Odio las tradiciones y las modas:
allá donde la masa avanza está la dirección equivocada.
Asesinan su conciencia sin escrúpulos,
prefieren dejar de ser individuos para ser parte del grupo.Nunca sufrirán lo que es pensar por uno mismo,
gregarios por comodidad que temen superar su instinto.
Por más que ponga la verdad delante de ellos,
es inútil quitar vendas a sujetos ciegos.Subo otra obra nueva y vuestro orgullo se retuerce de dolor
viéndose tan superado ante este mero trastornado,
cuya infame escritura injurian que es un simple don,
tratándo de hacer elusión de la altitud a la que me hallo.Ésta obra maestra solo será superada
cuando yo componga una segunda para destronarla,
mientras tanto guarden con pudor sus pobres letras,
pues yo vengo a ser Dios en esta tierra de profetas.Perdonen por mi ego a quienes mi virtud le ofenda,
pero ¿cómo hacerles creer en algo que no se demuestra?
Es mi obligación y mi deber abrir la celda a la bestia,
y permitir que devore a los que lideran.Ahora súbete a mi barco de demencia,
toma mi mano muerta y disfruta de las vistas
de esta oscuridad veraz y lúcida,
asómate y contempla la tormenta.Observa como los valores quedan al tirar de un hilo
derrumbados, cual pilares que ensordecen con su ruido.
Cediendo en la medida en que ceden paso al vacío,
revelando tras de sí un abismo frío...Yo ondeaba mi benevolencia hace unos años,
hasta que la amputaron, la vida me enseñó
que sólo un niño ve malo lo malo.
Y dejé de ser un santo cuando me cansé de cargar con el halo.
Y dejé de ser un santo cuando me cansé de cargar con el halo.
Análisis Lírico
Solitario levanta en "Siglo I d. S." un discurso que responde frontalmente a quienes lo acusan de promover el suicidio. Asegura que su propósito es dinamitar pilares morales y obligar a quienes lo escuchan a enfrentar la ausencia de sentido. Esta ofensiva contra la religión amplifica las tesis ya planteadas en "/Off": los dioses son proyecciones del miedo humano y el demonio es un invento para sentirse menos culpables. El tono es más combativo y declara que puede quitar las ganas de vivir con cuatro versos siempre que el receptor sea capaz de comprenderlos, recordando que la verdad es un mal necesario.
El poema se erige como manifiesto filosófico. Solitario se nombra "último filósofo serio del siglo" y afirma que no tiene ego, solo razón en los labios. Defiende a los odiados que no se adaptan, desprecia la obediencia gregaria y proclama que allá donde marcha la masa se abre la dirección equivocada. Esta visión recoge la evolución iniciada en "Costra afilada", pero la expande con un inventario de los enemigos del pensamiento crítico como son tradiciones, modas, hombres con espíritus de hormiga incapaces de sostenerse fuera de la fila. La genialidad, insiste, será reconocida cuando él esté muerto, como ocurriera con tantos autores malditos.
Solitario admite que años atrás ondeaba benevolencia pero la vida le amputó el halo y lo obligó a abrazar la aversión. La imagen enlaza con "Decapitado", donde cortó la cabeza a su pasado, y con "Apnea", que denunciaba la hipocresía sentimental. Ahora su tarea es abrir la celda a la bestia y permitir que devore a los líderes falsos. "Siglo I d. S." sintetiza el arco de 2017 mostrando a un Solitario que convierte su historia personal en doctrina, en una teología del nihilismo donde la única liturgia válida consiste en derribar valores para revelar el abismo.